Por si todavía queda alguien que no está familiarizado con el concepto de "Conciliación laboral, familiar y personal", consiste en hacer compatibles el trabajo remunerado con las responsabilidades familiares, respetando la satisfacción y desarrollo personales de cada individuo. Bueno, esto es muy bonito, pero ya sabemos todos que muy difícil de alcanzar. Básicamente, para que nos entendamos, buscar tiempo para el trabajo, los hijos, tu pareja, disfrutar del tiempo libre cultivando tus aficiones y estar satisfecho en todos estos ámbitos, es utópico. Si alguien se reconoce en este esquema ideal, que por favor me lo cuente. Si no, seguiré pensando que es tan probable como encontrarme un enano en el jardín. Y yo no tengo jardín.
La plataforma Conciliación Real Ya lo representa con un puzle de tres piezas: familia, persona y trabajo. Me parece un muy buen símil. El problema es que en la sociedad en la que vivimos resultan demasiadas piezas: el tiempo libre se compatibiliza fácilmente (casi siempre) con el trabajo cuando no tienes hijos, todos hemos vivido esa etapa. En el momento que tienes uno tiendes a sacrificar, al menos en parte, alguna de las otras dos. O renuncias al trabajo, o al tiempo para ti. Y aún así, no trabajar fuera de casa tampoco te garantiza tu parcela personal, porque la crianza de un hijo te absorbe casi por completo (o sin el casi).
Además, la mayoría no puede renunciar a su trabajo, así que intentando llegar a todo se olvidan un poco de sí. Por eso muchas madres recientes vamos por el mundo mal peinadas y con el primer trapo que pillamos puesto. Que también las habrá que todo el día van divinas: mis respetos. Cuando me reencarne me pido ser como vosotras, ¡mis ídolas! Además tampoco es que, por mucho que renuncies a tu tiempo libre, el trabajo te deje tiempo para cuidar de tus hijos como quieres. ¿Porqué?
- Las bajas de maternidad/paternidad son demasiado cortas. De hecho la baja de dieciséis semanas complica mucho la lactancia natural, que esa es otra.
- Los horarios de trabajo no ayudan demasiado, tanto para los trabajadores a turnos como con jornada partida (yo creo que la llaman partida porque te "parte" todo el día y al final no te da tiempo a "ná".
- Pocos Convenios recogen el derecho de faltar al trabajo para llevar a los hijos al médico.
Estando así las cosas en este país (ya nos gustaría ser un poco como los nórdicos es estas cuestiones, pero...), nos arreglamos como podemos entre guarderías, cuidadoras, abuelos... Personalmente las soluciones que para mi gusto son las mejores de las que disponemos (y no todos) son las reducciones de jornada, las excedencias, y la posibilidad del teletrabajo en algunos casos.
Después de esta laaaaaaaarga perorata de introducción, ¿cómo me lo monto yo?
Las condiciones de mi puesto de trabajo me hacen en este aspecto de la conciliación bastante afortunada. Bueno, afortunada porque me reconocen mis derechos y puedo evitar los riesgos, que si no...
Trabajo en el laboratorio de una industria alimentaria, y las características del puesto que desempeño hacen que sea incompatible tanto con el embarazo como con la lactancia natural. Es por ello que llevo sin trabajar desde el principio del embarazo, y mi permiso por riesgo para la lactancia se extiende hasta que Pablo cumpla nueve meses de edad. Luego me quedan unos días de vacaciones pendientes y volveré al trabajo.
La oportunidad de estar todos estos meses en casa con mi hijo la estoy aprovechando al máximo. Me siento afortunada y disfruto del tiempo con él, aunque sí es cierto que se agradece mucho la ayuda de PapádePablo, sin el cual algún día ya me habría tirado de los pelos hasta arrancarlos, ainssss. Menos mal que los momentos malos son los menos. Pero dentro de unos meses volveré a trabajar, que todo lo bueno se acaba, y mi despertador volverá a sonar a las cinco de la mañana. ¡Puffff!, con lo desentrenada que estoy...
Mi situación económica no me permite coger una reducción de jornada. Conste que la empresa no me pone trabas, de hecho una compañera tiene la jornada reducida y mi jefa también hasta hace poco. Ya quisiera yo reducirla también, pero no va a poder ser. Por lo menos trabajaré la mayor parte de los días en turno de mañana, gracias a que trabajo con gente que merece el título de compañera. Pero lo haremos de otro modo: el nuestro es uno de esos pocos casos en los que el que va a adaptar las condiciones de trabajo al cuidado del hijo es el padre.
PapádePablo tiene un trabajo de comercial, en el que las mañanas las dedica a labores de oficina y las tardes a los desplazamientos. Así que ha decidido (previa consulta con su empresa, claro) que cuando yo vuelva al trabajo, por las mañanas trabajará en casa mientras se ocupa del peque. Incluso tiene previsto cómo organizarse para cuando yo trabaje de tarde, a ver qué tal le sale. Para mí es la mayor de las tranquilidades: sé que no puedo dejar a mi hijo en mejores manos que las de su padre. Ya sé que me diréis que los niños están muy bien con los abuelos o en una guardería, y yo no digo lo contrario. Pero con sus padres están mejor si se lo pueden permitir, ¿no? Por lo menos vamos a intentarlo, que si no siempre estamos a tiempo de buscar otras soluciones.
Fácil no va a ser, pero para nadie lo es. Ser padres no es fácil, pero a día de hoy es el trabajo más hermoso que he desempeñado, y el más satisfactorio. Espero que en un futuro no demasiado lejano, la sociedad permita que todos tengan como mínimo las mismas facilidades que nos hemos encontrado nosotros, y todas las madres tengan una baja de al menos seis meses y los horarios sean más flexibles. Porque los niños son responsabilidad de sus padres, pero también de toda la sociedad, ¿no os parece?
Me ha gustado mucho este post, y el final me ha emocionado... pues si, los niños son el futuro de todos y la sociedad debería actuar en consecuencia y asumir que no hay nada mas importante que la crianza de ellos. Pero hasta entonces, mucho camino queda por recorrer...
ResponderEliminarDecir que los niños están muy bien en las guarderías porque asi socializan es una frase que se le dice a madres como yo para que se vayan al trabajo tranquilas. Yo llevo a Olivia a la guardería porque no me queda otra, pero ni socializa, ni está muy bien alli, ni me voy al trabajo con la conciencia tranquila. Boba no soy. Y un niño con quien mejor está es primero con su madre (al menos los primeros años) y después con su padre. En mi caso mi conciliación es bastante de risa... yo trabajo de 9 a 6 (tardo una hora en llegar al trabajo, asi que son 11 horas al dia fuera), la reducción de jornada era bastante dificil economicamente hablando, pero además, teniendo en cuenta que una de mis compañeras tiene reducción, y cuando estaba embarazada mi jefe me "aconsejó" de antemano que mejor que no se me ocurriese pedirla so pena de cabrear a superiores (él me lo decía porque me "aprecia", para "avisarme", no para amenazarme, no me vaya yo a pensar lo que no es), así que en fin... estoy esperando un milagro, o un décimo de lotería premiado, jijiji.
Elpadredelacriatura es funcionario y trabaja de 8 a 3, con lo cual yo dejo a Olivia en la guarde a las 8 y él la recoge a las 3.45. Esa es la conciliación nuestra. Muy conciliado todo, si... no se qué pasaría si elpadredelacriatura tuviese un curro como el mío... pero me hubiese pensado muy mucho tener hijos en una situación así, porque que mi hija pase mas de 8 horas al día con una persona que no sean sus padres es algo que ni concibo ni entiendo, lo siento. Hay que renunciar a algo, y no puedo comprender que dos personas con curros de 15 horas, en los que ganan un monton de pasta, tengan hijos para que se los cuiden internas en casa. Mi no entender. No se puede tener todo en la vida, hay que renunciar o posponer algo, lo siento, es así.
Me encanta que Pablo pueda disfrutar de su mamá todos estos meses, y luego de su papá. Es lo mejor sin duda. Y pasa de gilipolleces de guarderías y abuelos, que los bebés no socializan hasta por lo menos los 3 años, que no nos cuenten milongas.
Un besazo familia, lo vais a hacer muy muy bien!
Vaya horario complicado que tienes, la verdad. Lo bueno es que al entrar a las 9 puedes dejar a Olivia en la guardería, que si entrases a las 6 como yo no la podríais llevar ninguno de los dos, y a ver cómo lo apañábais... Los horarios laborales son de locura, es tremendo.
EliminarNo te sientas culpable, porque estás haciéndolo lo mejor posible, de verdad. La prueba de ello es que en tu tiempo libre, en lugar de descansar un poco más, que buena falta te hace, te dedicas a la niña sin escatimar el tiempo. Porque los comienzos con el baby led-weaning, por ejemplo, requieren de calma y paciencia, y entre lo que tarda en comer y limpiarlo todo...
Ya me han dicho en persona lo de que los niños socializan, sí. Pero lo que me ha sorprendido más es eso de que se inmunizan (!!!!!!!!!) Las guarderías son muy necesarias porque permiten mantener los puestos de trabajo de los cuales se vive, y en ellas trabajan profesionales que tienen mucho mérito porque cuidar a tantos niños debe ser un trabajo tremendo, pero ya está. No hace falta esgrimir argumentos cogidos por los pelos, estoy totalmente de acuerdo contigo.
Gracias por tus palabras, ¡biquiños! :-)
Me alegro mucho que tengáis las cosas relativamente fácil, lo de relativo es porque al final siempre tienes que hacer malabares para poder organizarte y estar con tu hijo y eso es cuanto menos preocupante. Partiendo de la base de las bajas que dices todo lo demás viene de la misma manera, vamos que esta muy bien reconocido esto de tener un hijo, son todo trabas.
ResponderEliminarYo me he cogido la reducción y doy gracias cada día por haberlo podido hacer porque de lo contrario me pasaría lo que dice verosa, la niña 8 horas diarias con la abuela, y vale es la abuela pero se me parte el alma. Lo hace ahora cuando el padre me dice q va a conocer más a mi madre que a el así que no me quiero imaginar si estuviera yo trabajando hasta las 6 también, un suplicio.
En fin espero que poco a poco nos parezcamos un pelin más a los nórdicos y no miremos mál a los compañeros x ser padres!
Besos
Está genial que puedas coger la reducción, es lo mejor.
EliminarVamos a ver si le pedimos a los Reyes que nos mejoren esas leyes; es difícil, pero como son magos... ;)
Un abrazote, otro beso y, por si no nos "leemos", ¡feliz año!